Durante tres siglos, la región de Filadelfia ha proporcionado un espacio significativo para los anabautistas menonitas de todo el mundo para poner en práctica nuestra fe cristiana no violenta. Las olas de plantación de Iglesias han fomentado nuevas conexiones en Nueva Jersey, Nueva York y Vermont y recientemente, las conexiones con Iglesias en California y Florida han expandido la geografía de la Conferencia Mosaica para llegar de costa a costa.
Desde 1725, pastores locales y ancianos de Mosaic Mennonite Conference se han reunido regularmente para aconsejarse, rezar y alentarse unos a otros/as. En ese año se reunieron con otros líderes de Pennsylvania para afirmar la Confesión de Fe de Dordrecht como base de la Iglesia Menonita en América.
La comunidad de la conferencia ha experimentado divisions dolorosas y reunion salegres. En 2019, una division importante fue sanada por la reconciliación de las Conferencias Menonitas del Distrito Este y Franconia, que se habían separado en 1847 por cuestiones de progreso, tolerancia y gobernanza. De esa reconciliación, nació la “Mosaic Conference”.
Aquellos que se han unido a la conferencia desde muchas naciones y culturas han aportado una nueva perspectiva y energía, transformando y revitalizando las prácticas de establecimiento de la paz, servicio y comunidad de apoyo. La comunidad menonita de EE. UU. ha luchado junto con otras tradiciones para desmantelar el racismo y el patriarcado, pero en la segunda mitad del siglo XX, un crecimiento constante de comprensión y experiencia ha llevado a una nueva era en la que las mujeres lideran la iglesia a nivel mundial y local así como hombres de diversos orígenes.
Sabiendo que sus antepasados/as fueron torturados/as y asesinados/as por sufe, los descendientes de los y las anabautistas de Europa durante muchos años sacrificaron el evangelismo por la seguridad, la estabilidad y la disciplina cristiana. Sin embargo, la influencia del evangelicalismo a fines del siglo XIX y principios del XX inspiró la fundación de congregaciones misioneras encomunidades rurales y urbanas, muchas de las cuales han sobrevivido y continúan prosperando en el siglo XXI. Además, las Conferencias del Distrito Este y Franconia enviaron trabajadores misioneros en todo el mundo para responder a las necesidades sociales, espirituales y humanitarias percibidas en el nombre de Jesús. Más recientemente, la misiónes ha centrado en el desarrollo y servicio comunitario, incluidas iniciativas tanto a nivel mundial como en centro surbanos de EE. UU.
Cuando el este de Pennsylvania era más rural, los menonitas eran principalmente agricultores y comerciantes como sus vecinos. A medida que crecieron los centro surbanos y suburbanos y aumentaron los niveles de educación, muchos menonitas se convirtieron en trabajadores de oficina, profesionales de negocios y empresarios, mientras que otros/as se mudaron para continuar la agricultura. Algunos menonitas de hoy todavía trabajan para preservar las tierras naturales y agrícolas como parte del testimonio cristiano. La comunidad de Mosaic Mennonite Conference hoy no está libre de los problemas e inconsistencias de seguir a Jesús en una sociedad acomodada, pero aún estamo sagradecidos por las oportunidades para aprender y crecer en este momento y lugar. La Conferencia prioriza el trabajo misional, intercultural y formativo, centrado en Jesús. En cada asamblea de la conferencia, afirmamos juntos: “Todavía estamos dispuestos a continuar en la fe simple y no resistente, buscando esa bendita esperanza, la gloriosa aparición de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo”.
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